N. 172 Julio – Septiembre 2014 Tamuz – Elul

172

Descargar Revista

Perseverancia

En el libro de los Proverbios o Mishlei del rey Salomón se lee: «…Porque siete
veces cae el sabio y vuelve a levantarse» (24:16). Estas palabras contenidas en el
Tanaj nos inspiran para volver a las manos de nuestros lectores, quienes han esperado
ansiosos la salida de Maguén-Escudo en estos momentos de restricciones
y escasez.
El Centro de Estudios Sefardíes de Caracas tiene como una de sus prioridades
la edición trimestral de su órgano de difusión, porque si bien hay un estado
general de desánimo que han convertido las despedidas de amigos y seres queridos
en algo cotidiano, también es cierto que la fe, la difusión de la cultura y el
disertación son los antídotos que el judío ha utilizado siempre para mantener su
existencia espiritual en los dos mil años desde que se inició la Diáspora.
El hebreo, tan dado a la búsqueda de la etimología de las palabras, tiene varios
términos para el concepto de lo que nosotros conocemos como perseverancia. La
traducción más socorrida es akshanut, cuya raíz akshán tiene dos connotaciones:
una negativa, relacionada con la tozudez y la obstinación; y otra, con la tenacidad.
Akshán tiene la misma ambigüedad que posee el vocablo «refractario» en español,
es decir, alguien que se niega a cambiar y el material que se que se mantiene inalterable
ante la acción del fuego. Pero, perseverancia también es «hatmada», que
contiene en su raíz la palabra tamid, siempre.
No hace falta seguir argumentando sobre el papel fundamental de la perseverancia
en el pueblo judío, que a lo largo de cinco mil años de historia así lo ha
demostrado. Echando la vista atrás en esos siglos de tozudez, tenacidad, constancia,
resistencia, mirando siempre hacia el futuro, Maguén-Escudo se ha propuesto
proseguir en su papel de difusor de la cultura judeoespañola y como puente de
entendimiento entre nosotros y nuestros compatriotas venezolanos mediante los
valores que nos son comunes.
El sabio español José Ortega y Gasset dijo: «Solo es posible avanzar cuando se
mira lejos. Solo cabe progresar cuando se piensa en grande». Nosotros, bebiendo
sabiduría de nuestras raíces judías e hispánicas, hemos decidido no cejar y continuar
nuestro camino… ¡Tamid!

Índice

TRES CABALLEROS de la cultura sefardí

Se cumplieron 120 años Conmemoración de la llegada del primer SÉFER TORÁ A CARACAS

PATRICK MODIANO: el discurso de un novelista

Apartamientos judíos en el cementerio LA PRIMAVERA DE MARACAY

De Curazao a la tierra firme venezolana: HISTORIA FAMILIAR de Abraham de Mordechay Haim Senior y Leah de David Senior

EL RONDADOR SEDIENTO, un romance lírico hispánico en el folclore sefardí de Oriente

YEHUDÁ HA-LEVÍ: su vida y su obra

Anuncio publicitario

N.168 julio – septiembre 2013 Tamuz – Elul 5773

DEF-REV. MAGUEN 168

Descargar Revista

Nuestros valores: SOLIDARIDAD
Entre las cosas que oímos al rabino Eli Bittán en sus continuas disertaciones
ante audiencias gentiles es que los judíos somos iguales a los otros pueblos, pero
nos diferenciamos de los demás por el apego al kashrut, unas normas dietéticas
que marcan nuestra vida, y moldean en cierta forma nuestras relaciones. Más allá
de esta consideración psicorreligiosa, otro elemento que hace al judío diferente al
entorno en el que estamos es su conciencia con la solidaridad como responsabilidad,
no solo religiosa, sino moral. A ella se apegan todos, sean observantes o no, por lo
que constituye un elemento de identidad básico entre judíos.
La hermandad, no solo expresada en palabras, sino básicamente en acciones,
en el que otra persona se siente en la obligación de tenderle una mano a quien
la necesite solo por el hecho de saberlo de su propio pueblo, ha logrado que
las comunidades judías puedan sobreponerse a las circunstancias adversas, por
muy extremas que estas sean: se demostró en tiempos de la Inquisición, cuando
los conversos emigraban secretamente hacia las comunidades de los Balcanes
o de Holanda, y rápidamente eran absorbidos por sus hermanos israelitas,
como también después de la II Guerra Mundial, que ayudaron a levantar a los
sobrevivientes del Holocausto, los cuales habían perdido absolutamente todo, y
no es una manera de hablar.
La solidaridad como cultura es una fortaleza que en Venezuela ha ido cogiendo
forma: desde la red de asistencia comunitaria, con instituciones donde concurren
sefardíes y askenazíes por igual para ayudar al prójimo, como también las
numerosas instituciones voluntarias, fundadas por judíos, con miras a satisfacer
necesidades de la sociedad general en la que estamos inmersos. Es, en definitiva,
el mejor ejemplo que se puede dar al mundo.
En una época de convulsión y de privaciones, de incertidumbre, recordar
este valor es un deber. Responder al llamado de quienes son vulnerables a los
embates de la economía siempre ha dado réditos: de allí surgen líderes que
comprenden mejor el valor de tener una comunidad organizada y sustentada por
la responsabilidad; de allí surge un pueblo con conciencia colectiva, autónomo,
con capacidad de aportar y de hacer el bien a los demás.

Índice

Acto de reconocimiento bajo la sucá  AIV honró a sus expresidentes con el BOTÓN DE ORO

Histórico encuentro en una sucá   LÍDERES RELIGIOSOS del país
se reunieron en la AIV

Premio Comunitario AIV otorga PREMIO AL MÉRITO COMUNITARIO a Hillo Ostfeld

CESC ENTREGÓ LIBROS a los nuevos bachilleres del Colegio Moral y Luces

De Noráfrica venimos  MARRUECOS: una exposición del MUSEO SEFARDÍ DE CARACAS

Enviado por el Departamento Rabínico de la AIV Rabino Samuel Garzón amplió sus
estudios de KASHRUT EN ISRAEL

NUESTRA AKEDÁ (Sacrificio)

¿LADRONES EN EL TEMPLO o mensajeros sagrados?

ROSH HASHANÁ y Diógenes

RECORDANDO AL RABINO OVADIA YOSEF, zatzal, paz en su santa memoria

DESCUBREN EL SIDUR MÁS ANTIGUO del mundo

Entrevista a los protagonistas  Así PORTUGAL RESTITUYÓ LA NACIONALIDAD a los sefardíes

«MARIA, hermana de Aarão, toca tu pandero» MÚSICA EN LA VIDA de las mujeres
criptojudías de Portugal (Primera Parte)

ISABEL LUÍS, LA BONITA: puesta en la casa del infierno por volverse loca

PLURILINGÜISMO y PANEUROPEÍSMO en la canción tradicional de El buen viejo

Qué significa LIBERTAD para Emmanuel Levinas

Presencia sefardí en MÉXICO

PROMINENTES MUJERES en la judería medieval

«¿Tu madre te ha dicho que SOMOS SEFARDITAS?»

 

N.164 Julio – Semptiembre 2012 Tamuz – Elul 5772

portada_164

Descargar Revista

Las palabras

Como religión abstracta que es, el judaísmo tiene su centro gravitacional en la palabra: no solo porque por medio de ella Di-os creó el Mundo, sino que mediante ellas el hombre se comunica con Él. En todo caso, las palabras tienen un carácter transformador en la vida judía: se considera que hay palabras que crean y hay otras que destruyen; unas que bendicen y otras que maldicen; unas que generan la paz y otras, la guerra.

En estos momentos que nos toca vivir en Venezuela y el Mundo, las palabras que pronunciamos y sobre todo las que escribimos —ya en papel, ya, y sobre todo, en el mundo cibernético— son responsables de contaminar o de descontaminar el entorno enrarecido de un mundo susceptible al insulto, la mentira, la manipulación, la descalificación, el odio y la maledicencia. Los medios de comunicación sirven de cajas de resonancias de estos discursos corrompidos y corruptores que nos han hecho olvidar la cortesía como estándar de intervención en el ámbito público, y con ella algunos valores como el respeto y la decencia, esenciales para que la paz se respire día a día.

Los judíos sabemos que las palabras no son inocentes: cuando nuestros padres nos advertían de no hacer del lashón hará nuestra forma natural de expresión, más allá de los planteamientos supersticiosos de algunos, nos lo decían por la necesidad de construir un mundo libre de malos sentimientos, que ellos llamaban «ángeles malvados». Ahora vemos con claridad cuánto daño hace un discurso, sobre todo si es público, lleno de improperios. De alguna manera, cada maldición lanzada al voleo crea odio y división, y abre las puertas para que el mal y la guerra entren a sus anchas. Así sucedió en la Alemania nazi, donde el verbo desmesurado de su líder llevó a la locura a una parte de la población que se lanzó en contra de nuestros correligionarios europeos hasta lograr prácticamente su desaparición.

Más recientemente, en Ruanda pasó algo similar, donde desde las alturas del poder se incitaba a una parte de la población a ir contra otra, con el supuesto de que se trataba de «cucarachas» que debían ser exterminadas. En la batalla verbal, los ciudadanos conscientes de que la malas lenguas pueden provocar tragedias, deben dar el primer paso en la construcción de la paz y moderar el lenguaje para no insultar ni devolver el insulto al prójimo, de forma tal de neutralizar el odio que estas palabras conllevan.

El Centro de Estudios Sefardíes de Caracas, uno de los órganos culturales de la Asociación Israelita de Venezuela, con estas palabras quiere hacer un llamado a nuestros conciudadanos para que cultiven la paz, la convivencia pacífica, la tolerancia, el respeto y la democracia mediante el buen decir, a utilizar la lengua en función del progreso de los seres humanos y no para su degradación, y con estas palabras les deseamos un año 5773 de armonía y muchas buenas cosas para decir.

Índice
Jesús “Chúo” Torrealba recibe Premio Moisés Sananes
Asociación Israelita de Venezuela instala comisión electoral
Museo Sefardí inauguró exposición titulada Presencia judía en el arte venezolano
Asociación Internacional de Críticos de Arte premia al Museo Sefardí de Caracas
Elaboran dulces kasher en la AIV para eventos religiosos
Un Nobel para SERGE HAROCHE
Tesoro de Preceptos donde se encierran Las joyas de los Seys cientos y treze Preceptos que encomendó el Señor a su Pueblo Israel
La Nación imaginaria de los escritores judíos latinoamericanos –II parte-
¿Quién fue David Curiel?
La Pascua de SUCCOT en Israel
La judería o mellah de Tetuán
Justicia para el restaurador de la comunidad judía de Portugal
No so komo las de agora: las cantigas judeoespañolas en el siglo XXI

 

N.160 Julio – Septiembre 2011 Tamuz – Elul 5771

portada maguen

Descargar Revista

El profesor de judeoespañol de la Universidad Ben Gurión y rabino de origen bosniaco Eliézer Papo, en una conferencia ofrecida en el Instituto Cervantes de Sofía a los asistentes a la I Cumbre de la Plataforma Erensya, organizada por la Casa Sefarad-Israel de España y el Centro Shalom de Bulgaria, al referirse al futuro del ladino contó una anécdota: recién llegado a Israel se hizo amigo de un rabino alepino, con el que fue a una de esas reuniones sobre el dialecto judío del idioma de Cervantes. Al salir su colega sirio le dijo: «nosotros nunca hablamos el judeoárabe, ni cantamos canciones en ese idioma, ni nos importa si se habla, si se cuenta, si hay una tradición así o asado; pero, ustedes los sefardíes organizan conferencias, hablan de sus canciones, se pelean por si un dicho es de esta u otra manera, que si en casa se comía esto o aquello, que si una palabra se usa de esta u otra forma, y al final de la jornada, se sientan a llorar porque el judeoespañol ya no se habla más».

Con este cuento, Papo no hace sino retratar el estado actual de la lengua ancestral de los judíos expulsos de España (ya sea yudezmo o jaquetía) y su futuro. Si bien hay un tono optimista en las palabras del joven rabino, también se nota que el porvenir de la lengua quedará limitada a la curiosidad de estudiosos y académicos, y que su valor como medio de comunicación, ya sea en el seno de la casa, o en el campo más abierto de la literatura o las artes escénicas, tiene sus días contados. La pregunta es la siguiente: ¿nos sentamos o no a llorar por la muerte del judeoespañol? Si nos propusiéramos hacer un número de Maguén-Escudo escrito todo en jaquetía, ¿sería comprendido por nuestros lectores? ¿Habrá suficientes artículos para llenar sus 72 páginas? ¿Empezaría la gente a «adrear» en sus casas relegando el español moderno? Y por otro lado, ¿está llamada nuestra generación a recitar el kadish por un bien cultural como este? La respuesta es incierta y quizá debamos decirla en ladino: está hazina ama ainda no está muerta.

En Plovdiv (la antigua Filibé o Filipópolis en Bulgaria) un grupo de mujeres y hombres de edad avanzada fundaron el Klubo del Ladino, y de esta maneramantienen viva la tradición en una comunidad que hoy cuenta con 450 inscritos de los cuales solo 46 judíos, según palabras de la tante Sophie Danon. El pueblo judío sabe resucitar idiomas: con la ayuda de Ben Yehuda rescató el hebreo de las cuatro paredes de las sinagogas y lo hizo una lengua vibrante y moderna, con la que Israel edita tratados de nanorrobótica. Es cuestión de propósito y de acción. Por lo tanto, ¡No hay que sentarse a llorar a las orillas de los ríos de Babilonia, sino trabajar! Buena anyada tengan todos.

Índice
La Exposición VISADOS PARA LA LIBERTAD fue presentada en la UCAB-Coro
MOR KARBASI, mucho más que voz
Lanzan libro «La identidad secreta de Francisco de Miranda» de José Chocrón Cohén
5 DE JULIO: un movimiento civil promovido por judíos, masones y librepensadores
Venezuela presente en la I CUMBRE DE LA PLATAFORMA ERENSYA EN BULGARIA
El CESC inició un nuevo ciclo de la cátedra de pensamiento judío contemporáneo en la UCV
HALLAN EL OSARIO DE UNA NIETA DE CAIFÁS de hace dos mil años
JACOBO CARCIENTE narró la vivencia de los judíos húngaros durante la ocupación nazi

N.148 Julio-Septiembre 2008 Tamuz-Elul 5768

148maguen

Descargar revista

Índice

Despedida al Cónsul de España en la Asociación Israelita de Venezuela

Entregarán a Moisés Garzón Serfaty credencial de Miembro Honorario de la AIV

Un paseo por la judería de Coria

La huella judía en Extremadura

“Diálogos de Amor” de Judá Abravanel

El jardín de José Chocrón Cohén

Los jóvenes en búsqueda de su identidad

Las cinco “R”: reflexión, responsabilidad, realismo, redimensión y relevo

El judezmo y la haquetía, dialectos de raíz hispánica

Una particular visión del Sionismo

Una sefardita con temple

Los candelabros

Jerusalén, la santa

Lejá Dodí

Poesía de Moisés Garzón para los egresados de Hebraica

La tradición sefardí va De tu boca al cielo

Presentada nueva publicación de Moisés Garzón Serfaty

Museo Sefardí de Caracas “Morris E. Curiel” arriba a su décimo aniversario

La luz de Caracas a través de los vitrales de sus sinagogas

Estudiantes de Historia Judía visitaron la AIV

La judeofobia y unos apuntes necesarios para poder luchar contra esa aberración

Presentan libro de relatos de Sonia Chocrón

 

N. 144, Julio-Septiembre 2007, Tamuz-Elul 5767

146

Descargar Revista

Índice

Salomón Cohén Botbol en la Galería de ex Presidentes de la AIV

Perfil de un caballero

Judíos esclavos por segunda vez en África

La judería de Monforte de Lemos

La diáspora en el Imperio Otomano

Una lectura de El inquisidor, de Francisco Ayala: re-creación histórica y cuestionamiento moral

Una ojeada a La eternidad es un pájaro errante (poemas), de Enrique Novick

El djudeo-espanyol bive i bivira

El legado de Simón Beker

El morito

El ladino se recupera del coma

El Museo de la Tolerancia de Sao Paulo

Reunión en la AIV con los integrantes de la Cátedra de Judaísmo Contemporáneo de la Universidad Central de Venezuela

Acercamiento a la ética, principios y valores judíos

Publican poesía reunida de Jacqueline Goldberg

Simposio en los treinta años de CIDICSEF

Piden declarar Patrimonio Histórico Nacional al Cementerio Judío de Coro

N. 140 Julio-Septiembre 2006 Tamuz-Elul 5766

Descargar Revista

Carta del Director

En este 2006 se cumplen quinientos años de la muerte de Colón. El 20 de mayo de 1506 murió en Valladolid el heroico e ilustre descubridor de un nuevo mundo, Don Cristóbal Colón, Almirante de la mar océana, viso rey y gobernador de las islas y tierra firme descubiertas. Se dice que sus restos fueron trasladados de Valladolid a las Cuevas de Sevilla, al monasterio de Santa María de las Cuevas en esa localidad, donde fue enterrado en la Capilla de Santa Ana, pero también se dice que de allí fueron trasladados sus restos a Santo Domingo, después a La Habana y de nuevo a España. Así pues, varios lugares se disputan el honor de ser depositarios del cadáver del judío Juan, su nombre cristiano, Colom, nombre que a los catorce años, al ser circuncidado, un rabino le cambió, imponiéndole el de Jaffuda. Pero como había que ocultar la condición de judío y fingir constantemente, además de su deseo de servir al pueblo de sus ancestros, Colón ingresó a la Hermandad de los Xptos. Ferens, integrada por conversos que llevaban interiormente su antigua fe, aunque vivían como cristianos. El nombre de esa Hermandad, en su sentido cristiano, significa: Portadores de Cristo, como lo fue San Cristóbal. De aquí su nuevo cambio de nombre. Debo consignar también que, por sus padres y abuelos, nuestro personaje era de linaje judío; nació en la Alquería Rossa y fue criado en el caserío de Génova, aledaño a la ciudad de Mallorca. El nombre de Génova, dado al pequeño asentamiento de escardadores de lana y tejedores, vino del recuerdo de la gran ciudad de Italia que los antepasados de Colón tuvieron que abandonar a mediados del siglo XIV, a causa de las guerras que allí y en ese tiempo se daban.

Todos estos datos que expongo tienen su fuente en un libro extraordinario de Ángel Rodríguez Valdés, que lleva por título El azotador de vientos, del que se hace una breve reseña en la sección “Para leer” de esta edición de Maguén-Escudo. Como se puede apreciar, la historia de Colón, descubridor de América, que nos enseñaban en el Liceo, dista mucho de la verdad, porque no convenía a los amos del poder que fuera divulgada. Exactamente como ocurre hoy, la historia sigue siendo tergiversada, amañada, atropellada. En estas páginas publicamos un trabajo del Dr. Leandro Rodríguez y un comentario de la Agencia EFE, en homenaje a la memoria del ilustre navegante, que no descubridor, para no herir la sensibilidad de los que abogan porque en lugar de descubrimiento se considere un “encuentro” de dos mundos, entre los que se encuentran quienes derriban estatuas de Colón, a la mejor usanza talibán, se oponen al Día de la Raza y niegan la hispanidad de la gesta, así como negaron y siguen negando la contribución judía a la misma. También encontramos en esta edición un interesante artículo sobre la contribución de judíos de Marruecos en la fase inicial de la creación de la comunidad portuguesa de Ámsterdam, del Dr. Moshé Liba; una exposición de pasajes notables en las comedias de Lope de Vega, de la Dra. María del Carmen Artigas; y un trabajo sobre las características de la religión de Israel, de Joseph D. Benmaman, PhD, además de otros no menos atractivos que completan este número de MaguénEscudo. Mis mejores deseos para todos en este nuevo año 5767.

Índice

XIII. Características de la religión de Israel

De Tarsis a Jerusalén-Sión

Cristóbal Colón

Juderías españolas

Afrontando el enterrado pasado judío

Contribución de judíos de Marruecos en la fase inicial de la creación de la comunidad portuguesa de Ámsterdam

Notables pasajes en las comedias de Lope de Vega: su relación con los judíos españoles

Pascua marrana

Una historia real

Isaac J. Pardo: una vida transparente

Presentacion de Exilio a la Vida

Los judíos en Marruecos y Melilla: su historia y status jurídico