A finales de febrero, el Centro de Estudios Sefardíes de Caracas en pleno sostuvo una reunión con los representantes de la Fundación para la Preservación del Patrimonio Hebreo Falconiano, presidido por el señor Herman Henríquez, cuya misión es la conservación del legado de la primera kehilá del país, concretamente el cementerio judío de Coro y la sala de oración, en la antigua residencia de la familia Senior.
A la reunión asistieron, además de Henríquez, el ex gobernador de Falcón, ingeniero José Curiel; los esposos Mery e Isaac Abelardo Coronado, miembros de la fundación; el ingeniero Jacob Carciente, autor de un libro sobre la historia de la comunidad de Coro y vicepresidente de la Fundación, así como también el arquitecto Alberto Moryusef, miembro de la junta directiva de la Asociación Israelita de Venezuela, y los señoras Nathaly Henríquez y Anabella Cupello Senior, esta última creadora y administradora en la red social Facebook de un grupo que reúne a los descendientes de esta prominente familia judía de Coro.
En la reunión de trabajo se trató sobre la urgencia que requiere el cementerio judío de Coro de algunas reparaciones que se necesitan para la preservación del camposanto. Aunque el lugar se considera parte del patrimonio cultural de ese estado centrooccidental, el mantenimiento corre por cuenta de la Fundación, a la que la Asociación Israelita de Venezuela va a prestarle toda la colaboración. La sala de oración, por su parte, se encuentra administrada por la Universidad Experimental Francisco de Miranda.
En la reunión se acordó que un plazo perentorio se debe nombrar nuevas autoridades de la Fundación, que deben acompañar al señor Henríquez, a quien se le ratificó en el cargo.